Poema de Jesús A. San Martín
A RICARDO TOMILLO
(Romántico
soñador
de
Torremolinos,
cuya
nave quedó anclada
en
la isla del tesoro
de
su juventud)
Tu
corazón es cuaderno,
libro
con hojas de otoño,
donde
la pluma del viento
pincela
quimeras de oro.
En
la arena de la playa
enciendes
tu soledad
y
la noche te acompaña
con
monótono compás.
La
luna de tu nostalgia
vibra
en la cuna del mar,
mecida
en sueños de plata
y
en recuerdos de cristal.
Melancólico
y bohemio
soñador
empedernido,
en
las esquinas del tiempo
tu
reloj se ha detenido.
Tú
coleccionas estrellas
de
las noches del ayer,
agua
recoges en cestas
y
jamás calmas tu sed.
Tu
presente queda lejos,
pues
tu vivir es pasado
prisionero
en un espejo
de
añoranzas enmarcado.
Buscas
del mundo lo bello:
ilumina
tu vagar,
que
este mundo de ciegos
lo
bello es oscuridad.
y
no apagues tu soñar,
que
los sueños, todos ellos,
son
la pura realidad,
aunque
los sueñes despierto.
El
ayer es ilusión
que
acaricia tus entrañas;
el
ayer, cándida flor
por
el tiempo deshojada.
Con
fuego de tu añoranza
mantén
hoy vivo el amor;
no
pienses en el mañana:
te
hará humo el corazón.
Ricardo con su Noemí